Enfermedad de Graves
¿Qué es?
La Enfermedad de Graves es un trastorno autoinmune que afecta la tiroides, una glándula clave del sistema endocrino. Es la causa más común de hipertiroidismo, una condición en la que la tiroides produce demasiadas hormonas tiroideas.
Causas
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Autoinmunidad: El sistema inmunitario produce anticuerpos llamados TSI (inmunoglobulinas estimulantes del tiroides), que activan la glándula tiroidea de forma excesiva.
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Factores genéticos y ambientales, como el estrés, el tabaquismo, o infecciones virales, pueden influir.
Síntomas principales
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Generales: Fatiga, pérdida de peso inexplicada, sudoración excesiva.
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Cardiovasculares: Taquicardia, palpitaciones.
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Neuromusculares: Temblor, debilidad muscular.
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Psicológicos: Ansiedad, irritabilidad, insomnio.
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Oculares (Oftalmopatía de Graves):
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Ojos prominentes (exoftalmos).
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Irritación ocular, visión doble.
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Piel (Dermopatía de Graves): Engrosamiento en la piel, especialmente en las piernas.
Diagnóstico
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Análisis de sangre: Niveles elevados de hormonas tiroideas (T3 y T4) y bajos de TSH.
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Pruebas de anticuerpos: TSI o TRAb (anticuerpos estimulantes del receptor de TSH).
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Imagen: Gammagrafía tiroidea para confirmar la hiperactividad de la glándula.
Tratamiento
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Fármacos antitiroideos: Metimazol o propiltiouracilo (PTU) para reducir la producción hormonal.
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Yodo radiactivo: Para destruir parte de la glándula tiroides.
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Cirugía: Tiroidectomía en casos graves o cuando otros tratamientos fallan.
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Tratamientos sintomáticos: Betabloqueantes para controlar los síntomas cardíacos.
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Oftalmopatía: Corticoides o cirugía en casos graves.
Complicaciones
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Crisis tiroidea: Una emergencia médica causada por niveles extremadamente altos de hormonas tiroideas.
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Problemas cardíacos, como insuficiencia cardíaca.
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Afectación ocular severa que puede llevar a pérdida de visión.
Prevención de la Enfermedad de Graves
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Evita el tabaquismo: Disminuye el riesgo de agravamiento de la oftalmopatía y la enfermedad.
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Manejo del estrés: Practicar técnicas de relajación como meditación o ejercicio ayuda a reducir el riesgo.
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Chequeos médicos regulares: Detectar anomalías tiroideas a tiempo.
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Dieta equilibrada: Mantener una ingesta adecuada de yodo y evitar alimentos goitrogénicos.