La Unidad de Producción Celular de Salamanca es una estructura funcional que reúne las características requeridas legalmente para la fabricación de productos celulares de uso clínico bajo Normas de Correcta Fabricación (NCF). La Unidad fue acreditada por la Agencia Española de Medicamentos y productos sanitarios en 2009 y durante el año 2012 ha sido nuevamente inspeccionada y recertificada para el cumplimiento de normativa de normas de correcta fabricación.


La actividad principal de la Unidad se centra en la fabricación de células mesenquimales, tanto autólogas como alogénicas, para su utilización en humanos, bien mediante ensayos clínicos o a través del programa de uso compasivo. Las indicaciones terapéuticas actuales se centran en el tratamiento de enfermos hematológicos y pacientes con distintas enfermedades osteoarticulares, vasculares, pulmonares y autoinmunes.