Los cambios impuestos por el progreso científico y tecnológico, los nuevos perfiles epidemiológicos y sociales de la población, los cambios producidos en los sistemas de información y en los modelos de organización sanitaria, las nuevas exigencias de la sociedad y las expectativas de los usuarios respecto a los servicios de salud hacen necesario la actualización y adaptación de los profesionales y organizadores a este nuevo escenario.
La salud ha pasado a ser considerada un valor de primer orden. La orientación al usuario de los servicios sanitarios es también un valor en alza. La sanidad se considera un servicio público y el usuario exige calidad no solo en la atención "técnica" sino también en el trato, en la calidad humana de esa atención.
La Gerencia Regional de Salud, y por lo tanto, la Dirección de Enfermería de este centro hospitalario, tienen como objetivo prioritario la provisión de servicios sanitarios de calidad a los ciudadanos. Uno de los pilares en los que se asienta esta calidad es, sin duda, la competencia de sus profesionales.
La garantía de la competencia profesional es una necesidad incuestionable tanto para los propios profesionales como por las organizaciones y los usuarios. La mejor formación reglada necesaria para acceder al puesto de trabajo, no garantiza indefinidamente la competencia profesional, de ahí la necesidad de establecer planes formativos destinados a mantener, desarrollar o mejorar los conocimientos, las habilidades y las actitudes, necesarias para el desempeño profesional idóneo.
La herramienta para cubrir esta necesidad es sin duda la Formación Continuada, dirigida a conseguir el objetivo del sistema sanitario: mejora la calidad de la atención sanitaria al ciudadano.
En este área de la web podreís encontrar toda la información relativa a la Formación continuada.