EL MUNDO
La EPOC y el asma son dos enfermedades inflamatorias muy prevalentes, caracterizadas por la obstrucción del flujo aéreo.
Respirar es un acto que pasa desapercibido, sin embargo, seguir sumando días a la vida depende de ello. Por este motivo, cuando una enfermedad ataca en la diana de esa acción inconsciente, la comunidad científica y médica se afana por ‘remendar’ el daño. En ocasiones, no es fácil porque el tejido afectado no puede repararse con los tratamientos habituales. Entonces, la innovación aparece para cambiar su curso.
Nos habla de ellos Graciela López Muñiz, neumóloga del Hospital Universitario Río Hortega de Valladolid: