La Junta ha aprobado el gasto necesario, por valor de 200.000 euros, para la adquisición de 460.000 cucharillas destinadas a la toma de muestras en el tronco encefálico de los animales de las especies bovina, ovina y caprina que son sacrificados en los mataderos de Castilla y León

La Junta de Castilla y León ha tratado, en la reunión de hoy de su Consejo de Gobierno, un expediente de la Consejería de Sanidad, correspondiente al suministro de 460.000 unidades de cucharillas con las que los veterinarios de los Servicios de Control oficial de la Agencia de Protección de la Salud y Seguridad Alimentaria tomen las muestras de tronco encefálicos de animales bovinos, ovinos y caprinos que son sacrificados en los mataderos de la Comunidad, al objeto de detectar posibles encefalopatías espongiformes transmisibles.

En concreto, el montante de este contrato de suministros asciende a 200.000 euros, repartidos entre 170.000 euros para la adquisición de 400.000 cucharillas específicas para ganado bovino y otros 30.000 para 60.000 unidades de ovino-caprino.

La toma de muestras para detectar posibles encefalopatías espongiformes forma parte de las actividades de Control oficial que llevan a cabo los veterinarios de la Junta en los mataderos de Castilla y supone la obligación de tomar esas muestras de tronco encefálico para realizar el test de diagnóstico en todos los animales, bovinos, ovinos y caprinos, sacrificados atendiendo a los criterios de edad y de destino regulados a través del Real decreto 3454/2000.

En Castilla y León, la previsión de la Agencia de Protección de la Salud y Seguridad Alimentaria estima que a lo largo de 2008 se recogerán entorno a 113.000 muestras, de las 100.000 corresponderán a bovinos y unas 13.000 a ovino-caprino.