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Se ha publicado una revisión sistemática que analiza la evidencia disponible de la farmacoterapia para el tratamiento del ataque agudo de migraña. Los tratamientos se presentan clasificados, de mayor a menor fuerza de evidencia sobre su eficacia, en:

- Nivel A (al menos, 2 estudios de Clase I): el ácido acetilsalicílico (AAS), los AINEs diclofenaco, ibuprofeno y naproxeno; los derivados ergóticos dihidroergotamina inhalada/nasal; así como los triptanes. También incluyen paracetamol para ataques de migraña no incapacitantes y las combinaciones paracetamol/AAS/cafeína y sumatriptán/naproxeno.

- Nivel B (1 estudio de Clase I o 2 estudios de Clase II): los antieméticos intravenosos clorpromazina, droperidol y metoclopramida; dihidroergotamina intravenosa –IV-, intramuscular –IM- y subcutánea –SC- y la combinación ergotamina/cafeína; los AINEs flurbiprofeno, ketoprofeno y ketorolaco IV/IM; y las combinaciones codeína/paracetamol y tramadol/paracematol aunque no se recomiendan para uso regular.

- Nivel C (1 estudio de Clase II o 2 estudios de Clase III): valproato IV, fenazona, los opioides codeína, tramadol, meperidina y metadona; dexametasona IV y lidocaína intranasal.

- Nivel U (evidencia conflictiva o inadecuada): celecoxib, lidocaína IV e hidrocortisona IV.

Por otro lado, destacan los tratamientos no eficaces subdivididos en nivel B negativo (octreótido subcutáneo) y nivel C negativo (clorpromazina IM, granisetrón IV, ketorolaco nasal, paracetamol IV).

Los autores concluyen que los médicos deben considerar la eficacia de la medicación, los potenciales efectos adversos y eventos adversos relacionados con la medicación, las contraindicaciones específicas de cada paciente y las interacciones entre fármacos cuando prescriban medicación aguda para los ataques de migraña.

Contenido elaborado por Mª Isabel Jiménez Serranía y Belén Calabozo Freile