Que tus pies... No te dejen a medio camino
El Colegio Oficial de Podólogos de Castilla y León, en su constante labor y afán por mejorar la salud del pie, ofrece estos consejos con el deseo de que sean de utilidad para todos, en especial a los Peregrinos del Camino de Sanitago.
Si está dentro del grupo de personas que tienen un "pie de riesgo", diabético o tiene alguna enfermedad neurológica o vascular este decálogo es de vital importancia para evitar complicaciones posteriores.
- No estrenar calzado en el momento de comenzar el Camino. Le resultará más cómodo un calzado de suela gruesa y flexible, sin contrafuertes duros ni muy curvos, ni punteras duras, así como no poner plásticos y gomas en contacto con la piel.
- Evitar cordones ajustados y costuras que puedan provocar lesiones en la piel.
- Use calcetín de hilo, lana o algodón, que almohadille los tobillos, que absorba la humedad y sea transpirable.
- Utilice zapatillas de baño en vestuarios y duchas colectivas.
- Córtese las uñas de forma recta. El Podólogo deberá tratar las uñas encarnadas o con problemas.
- Se aconseja baños de agua templada con sal (por cada litro de agua, una cucharada sopera de sal), al menos cinco minutos.
- Después del baño séquese muy bien, en especial entre los dedos, siendo conveniente aplicar antitranspirantes con fungicidas, para evitar maceraciones, irritaciones y enfermedades contagiosas (hongos, papilomas, etc.).
- Masajear suavemente desde los dedos al talón.
- Si le han salido ampollas, tratarlas con especial limpieza; según los casos, extraer el contenido con instrumental estéril, dejando de drenaje, parte del hilo del que se compone el material de sutura, y aplicar antisépticos.
- Ante lesiones o heridas complicadas del pie, visite al Podólogo más cercano.