Comercialización de Complementos Alimenticios
Los complementos alimenticios, se definen en el Real Decreto 1487/2009, de 26 de septiembre, como "los productos alimenticios cuyo fin sea complementar la dieta normal y consistentes en fuentes concentradas de nutrientes o de otras sustancias que tengan un efecto nutricional o fisiológico, en forma simple o combinada, comercializados en forma dosificada, es decir cápsulas, pastillas, tabletas, píldoras y otras formas similares, bolsitas de polvos, ampollas de líquido, botellas con cuentagotas y otras formas similares de líquidos y polvos que deben tomarse en pequeñas cantidades unitarias".
Los complementos alimenticios se deben tomar a las dosis diarias recomendadas en el etiquetado del producto, que no deben ser excedidas.
Los complementos alimenticios no deben utilizarse para sustituir una dieta variada y equilibrada y un estilo de vida saludable.