El dolor crónico es un problema que afecta a 416.078 personas en Castilla y León, por lo que su abordaje es una de las prioridades del Sistema Regional de Salud. Para ello se ha decidido unificar los recursos y los profesionales especializados en esta materia en una sola Unidad de tratamiento del dolor, lo que permitirá proporcionar un servicio más eficaz a los pacientes y alcanzar un modelo de excelencia en este servicio sanitario.
Actualmente hay en Castilla y León 416.078 pacientes que padecen dolor crónico. Este problema de salud genera además perjuicios sociales, con cerca de 112.000 personas que padecen aislamiento por esta causa; y económicos, registrándose por este motivo en la Comunidad casi seis millones de bajas laborales con un impacto de 131 millones de euros.
Para atender las necesidades de este grupo poblacional, se han llevado a cabo un total de 23.457 consultas sanitarias el año pasado. El 80% de las cuáles se han realizado en los 247 centros de salud y 3.655 consultorios locales que conforman la Atención Primaria castellana y leonesa.
Por todos estos motivos, el abordaje y tratamiento del dolor es una prioridad de los servicios sanitarios de la Comunidad. Y con el fin de ofrecer a estos pacientes la mejor atención posible, el 9 de enero de 2017, se autorizó la formalización de una alianza estratégica en la que trabajan de manera conjunta los expertos en esta materia de las áreas de salud Valladolid Este y Oeste. Y, de este modo, nació la Unidad de Tratamiento del Dolor (UTD) que se inaugura hoy y que es, asimismo, referencia para la población de Segovia, Burgos, Palencia y Soria. Se estima que este servicio va atender a unas 10.000 personas al año.
El fomento del trabajo en equipo que deriva de estas decisiones redunda en el beneficio de los ciudadanos, que son atendidos finalmente por una unidad que aúna los recursos y la experiencia propios de cada centro sanitario implicado en la misma. Lo que facilita el intercambio de conocimientos, el trabajo en busca de un modelo de excelencia y el alcance, en definitiva, de las respuestas más eficientes posibles para cada caso clínico.
Para ello, la Unidad de Tratamiento del Dolor contará con un único responsable que se encargará de dirigir el trabajo de la misma, coordinar la actividad del personal, custodiar y utilizar de manera adecuada los recursos de que disponen y, en resumen, garantizar el correcto funcionamiento de todo el proyecto. Esta figura la ocupara el doctor Enrique Ortega, actual jefe de sección de la Unidad de dolor del Hospital Universitario Río Hortega.
Objetivos de la Unidad del Tratamiento del Dolor
La UTD se crea, por lo tanto, con la finalidad de alcanzar una serie de metas concretas que giran en torno a dar una atención integral, con un único protocolo asistencial, para toda la población atendida desde la misma. Con esto se logrará mejorar los tiempos de acceso a los tratamientos y la realización de una valoración multidisciplinar de cada historia clínica.
Asimismo, la Unidad ofrecerá soporte psicológico a sus usuarios, abordará el dolor infantil y pondrá en marcha programas de tratamiento multidisciplinar intensivo, orientados a la reinserción laboral de los pacientes con dolor crónico. También, dentro del espíritu de fomentar la coordinación y el trabajo conjunto en el que se basa, creará un programa de formación para Atención Primaria, como sistema eficaz de enlace entre este nivel asistencial y la Atención Especializada; y desarrollará un sistema de consulta telefónica con las unidades del dolor del resto de hospitales y centros de salud y consultorios de la Comunidad. Esta red telefónica permitirá, a mayores, que los profesionales de este servicio realicen consultas a los de otras especialidades sanitarias que puedan colaborar para garantizar la mejor asistencia a los pacientes.
Unidad multidisciplinar
Siguiendo las estrategias marcadas por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad en materia de dolor, se ha trabajado por conseguir una Unidad de Tratamiento del Dolor multidisciplinar y de nivel III (máxima complejidad otorgada en el SNS). Dos condiciones que la acreditan como servicio con capacidad para tratar a pacientes con dolor crónico de cualquier etiología desde diversa perspectivas, tanto desde el punto de vista sanitario, como psicológico, social y laboral.
Para lograrlo esta unidad oferta atención en consulta externa de diagnóstico y tratamiento, hospital de día, hospitalización convencional, realización de procedimientos quirúrgicos e interconsultas. Y todos estos aspectos asistenciales estarán atendidos por cinco anestesistas, un rehabilitador y cuatro enfermeras especializadas en dolor.
La UTD contará además con un psicólogo clínico. Su presencia servirá para ofrecer tratamientos altamente eficientes, de los que no se dispone actualmente, como la terapia cognitivo conductual o la autohipnosis. Asimismo, se incorporarán al proyecto otros profesionales en calidad de consultores siempre que sea necesario.
Por áreas de salud debemos especificar que el Área de Salud Valladolid Este aporta la colaboración de los profesionales del Servicio de Neurocirugía del Hospital Clínico Universitario. Con el fin de que estos ayuden a evaluar a los pacientes con dolor neuropático complejo y les ofrezcan la posibilidad de añadir a los tradicionales tratamientos de este tipo de patologías, otros más innovadores como por ejemplo la estimulación cortical.
El Área de Salud Valladolid Oeste mantiene el funcionamiento de los dos quirófanos semanales, destinados a las patologías relacionadas con el dolor, y las camas de hospitalización. Todo ello localizado en el Hospital Universitario Río Hortega.
Además se contará con las unidades de columna de traumatología de ambos hospitales, que aportan médicos especialistas en la evaluación y tratamiento de los pacientes con dolor espinal complejo. Y formarán parte del equipo los pediatras especializados en el tratamiento del dolor en niños (Unidad de tratamiento del dolor infantil) y el funcionamiento de una consulta monográfica de dolor pélvico.
A nivel de equipamiento la Unidad estará dotada con sistemas de radioescopia, ecografía y generadores de radiofrecuencia, que se emplearán en el control del dolor crónico. Y tendrá, incluso, una sala provista de un sillón de odontología para permitir el tratamiento del dolor orofacial.
Por último hay que señalar que, para completar estos servicios y, dentro de la línea de mejora constate de la calidad en el tratamiento del dolor crónico que está desarrollando la Gerencia Regional de Salud, se ha constituido también un Comité técnico asesor con representación de las principales especialidades sanitarias implicadas en el abordaje integral de este problema de salud. Su finalidad es la de promover la formación en dolor (tanto de los profesionales sanitarios como de los propios ciudadanos) y mejorar las acciones desarrolladas para la prevención de la aparición del mismo.