Ubicadas en la planta de Hematología, están gestionadas por ALCLES y han sido remodeladas y equipadas por la Fundación Alimerka
25/01/23 La directora médica del CAULE, Elena Bollo, acompañada del jefe de servicio de Hematología, José Antonio Rodríguez, el director de la Fundación Alimerka, Antonio Blanco, y la presidenta de ALCLES (Asociación Leonesa con las Enfermedades de la Sangre), Nonia Alejandre, presentaron el miércoles 25 de enero las dos nuevas salas de respiro para pacientes y familiares ubicadas en el Hospital de León. Las salas han sido cedidas por el CAULE, están gestionadas por ALCLES y han sido remodeladas y equipadas por la Fundación Alimerka, con una inversión de 10.000 euros. En la visita a las salas, que han recibido los nombres Más cerca de tí y Dónde tú estés también participaron la subdirectora de Enfermería, Ana Belén Alonso, y el supevisor Miguel Torres Miñones.
Ubicadas en la planta de Hematología, las salas están equipadas con sofás, cafetera, nevera, microondas, televisión... todo lo necesario para un descanso fuera de las habitaciones y los pasillos del centro sanitario. Alimerka también se encarga del abastecimiento continuo de productos.
El proyecto ha perseguido mejorar los espacios y romper con la imagen más tradicional del entorno clínico, además de generar un ambiente más familiar. La premisa ha sido la de generar un espacio cómodo, donde tanto pacientes como sus allegados puedan descansar física y mentalmente en momentos duros.
En la presentación, Elena Bollo, directora médica del Hospital Universitario de León, manifestó que el CAULE ya trabaja con distintos proyectos de humanización de la Sanidad desde 2011. "Enmarcada en el Plan Persona 2021-2025, de la Consejería de Sanidad, tenemos una comisión de Humanización, en la que también está integrada Atención Primaria y en la que trabajamos en trato, calidez en el entorno de asistencial, comunicación y escucha activa de las necesidades de los pacientes y de los acompañantes", señaló.
Antonio Blanco Prieto, director de la Fundación Alimerka, manifestó que desde su organización están "especialmente agradecidos al CAULE y a ALCLES, por tener la oportunidad de seguir ampliando el Programa de Humanización Hospitalaria en León". "Empezamos a través de la Asociación Española Contra el Cáncer, con un programa de apoyo, y con ALCLES estábamos colaborando también a través de las viviendas que tienen frente al hospital, para los pacientes desplazados. Esta oportunidad nos pareció fundamental porque nuestro mayor interés es que las familias y el personal sanitario pueda usarlo y que nos vayan transmitiendo las posibilidades de mejora; son proyectos vivos que iremos adaptando progresivamente", resaltó.
Nonia Alejandre Aguado-Solís, presidenta de ALCLES, ha recordado la necesidad de escucha a las asociaciones de pacientes y ha explicado el proceso hasta lograr las salas con las que cuentan hoy. "Agradecemos este logro y avance para mejorar la calidad de vida de los pacientes y familiares oncohematologicos. Las sala de respiro de la planta de hematología es uno de nuestros principales servicios y fue también, en su momento, uno de nuestros grandes retos", expresó.
La presidenta de ALCLES también puso de relieve lo bien recibido que ha sido el espacio: "Algún enfermo sale a comer a estas salas a veces para cambiar un poco de ambiente y hemos podido ver cómo, en la época del Covid, el espacio permitió a una familia celebrar ahí la Navidad. Son detalles pequeñitos, pero muy importantes para para el día a día del paciente con los que nos sentimos totalmente comprometidos".
Por su parte, José Antonio Rodríguez, jefe de servicio de de Hematología y Hemoterapia, ha explicado que estas salas son importantes, no solo por la cantidad de personas que las usan (unas 400 al año), sino también "por las características de estos pacientes, ya que en muchos casos se trata de ingresos muy prolongados".
"El paciente que acude para un trasplante o un paciente que tiene una leucemia aguda necesitan ingresos superiores a las tres semanas, en algunos casos hasta de 2 meses. Esto hace que el número de estancias anuales que estamos teniendo se va aproximando a las 5.000 estancias. Además, por las características de muchos de estos pacientes es recomendable que estén acompañados porque se encuentran en mal estado; el apoyo familiar es fundamental. Desde el servicio sanitario intentamos ofrecerles lo mejor que tenemos, pero hay aspectos emocionales, como estas salas de respiro, que ofrecen un salto cualitativo", afirmó.