Mantener una dieta adecuada favorece el correcto control metabólico (no sólo el glucémico, también el de las grasas-colesterol, ácido úrico,...) y con ello la reducción de las complicaciones a largo plazo. Debe ser una dieta personalizada y es importante procurar que sea realista para favorecer su cumplimiento.


En los casos de diabetes mellitus tipo 1 en niños y adolescentes es fundamental aportar las calorías necesarias para asegurar el adecuado crecimiento y desarrollo.


En todos los casos es importante distribuir correctamente los hidratos de carbono a lo largo del día para evitar tanto la hipo como la hiperglucemia.


Con este fin la Guía de práctica Clínica de diabetes mellitus tipo 2 avalada por la Sociedad castellano-leonesa de endocrinología diabetes y nutrición establece recomendaciones para favorecer el mantenimiento de una dieta adecuada:


- Trate de mantener un horario de comidas regular y no se salte ninguna comida (3 comidas

principales y 2 - 3 suplementos entre horas).


- Procure una alimentación variada combinando los alimentos para evitar la monotonía.


- Es recomendable ingerir entre 500-700 cc de leche o derivados (desnatados o semidesnatados) al

día.


- Para la preparación de las comidas utilice preferentemente aceite de oliva. Evite en lo posible los

fritos, los rebozados y las salsas e incremente la preparación de alimentos cocidos o a la plancha.

No consuma comidas precocinadas y "rápida


- Restrinja el consumo de huevos a 2-3 por semana y mejor en forma de tortilla francesa o cocidos.


- Consuma legumbres 2-4 veces por semana.


- Coma verduras en toda las comidas principales.


- Consumir preferentemente quesos frescos y desnatados, limitando el consumo de quesos curados.


- Evite el consumo de azúcar y productos que lo contengan (mermelada, miel, caramelos, dulces,

pasteles, frutas en almíbar, helados...). Utilice edulcorantes sin calorías.


- Elija con más frecuencia pescado que carne. Son aconsejables tanto el pescado blanco como el

pescado azul. Cuando coma carne trate de elegir carnes pobres en grasas (magras) y retire en crudo

las grasas visibles de los alimentos y la piel de las aves.


- Evite el alcohol o modere su consumo.


- Como norma general, recuerde que el aporte diario de sodio será inferior a 3 g/día, e inferior a 2,4

g/día si tiene la tensión alta. No suprima totalmente el aporte de sodio, salvo que sea por indicación

facultativa.


- Consuma agua e infusiones libremente (salvo contraindicación facultativa), ya que no aportan

calorías y contribuyen a mejorar la hidratación.


- Evite las margarinas y mantequillas y limite el consumo de frutos secos, sobre todo si tiene

sobrepeso.


- Consulte con el médico todas las dudas y sugerencias que se le planteen.


- Realice ejercicio físico todos los días, adaptándolo a sus preferencias (caminar, paseos en bicicleta,

natación, etc.). practicándolo de manera regular, siempre y cuando no estén contraindicados por

otros motivos. Evite aquellos deportes de contacto o que requieran esfuerzo extenuante.


Recomendaciones sobre la actividad física Guía de práctica Clínica de diabetes mellitus tipo 2 avalada por la Sociedad castellano-leonesa de endocrinología diabetes y nutrición:


- Realice actividad física de forma regular, comience con una intensidad y duración baja/media y

paulatinamente vaya incrementado hasta alcanzar una duración de ejercicio diario de 60 minutos con

intensidad media.


- Acomode la actividad a sus gustos o preferencias e inclúyalo entre sus actividades cotidianas, (ej.

subir y bajar escaleras, en lugar de utilizar el ascensor, caminar el trayecto desde el domicilio a su

lugar de trabajo, realizar las tareas domésticas con rapidez, llevar a cabo los trabajos de

mantenimiento del jardín...). Únicamente se desaconsejan los ejercicios o deportes de contacto que

requieran un esfuerzo extenuante.